Caída en la recaudación en 2024: el cine español analiza las causas y confía en el futuro inmediato

La recaudación del cine español en la primera parte del año descendió un 30% respecto al mismo periodo del año anterior, al recaudar 22.937.871 euros y 3,5 millones de espectadores, muy por debajo de los 33 millones de euros y los 5,5 millones de espectadores de los primeros seis meses de 2023. Si bien es cierto que la taquilla global no ha sido muy positiva, parece necesario analizar qué ha ocurrido en el caso de las películas españolas estrenadas entre enero y junio, que, según datos del Ministerio de Cultura, solo superaban el millón de euros de recaudación en siete casos: 'La familia Beneton' (4 millones), 'Ocho apellidos marroquís' (3,3 millones), 'Menudas piezas' (2,5 millones), 'Dragonkeeper: Guardiana de dragones' (1,9 millones), 'Valle de sombras' (1,6 millones), 'El correo' (1,6 millones) y 'Políticamente incorrectos' (un millón). Desde la publicación de esos datos, se unió al club 'Casa en llamas'.

Este "ranking" puede considerarse provisional, ya que 'La sociedad de la nieve' , de J.A. Bayona, se encuentra en tercer o cuarto puesto de las más vistas de esta primera parte, a falta de que el ICAA las incluya próximamente. Además, es importante resaltar también que la segunda parte del año ha arrancado con la taquillera 'Padre no hay más que uno 4', que ha se ha convertido en el mejor estreno español del año y que acumula ya 6,3 millones de euros de recaudación. ¿Será este un buen inicio para una segunda parte que promete, según algunos protagonistas del sector, unos buenos resultados?

La presidenta de la Asociación Estatal de Productoras de Cine (AECine), María Luisa Gutiérrez, ha hecho balance para Kinótico de la taquilla del primer semestre y ha destacado algunas de las medidas que cree necesarias para el cine nacional. A su juicio, si se quiere que el cine "funcione" tiene que ser "una cuestión de Estado" al igual que ocurre "en otros países", al tiempo que ve importante que los agentes que intervienen en la cadena -esto es, productores, distribuidores y exhibidores-jueguen "con las mismas reglas y en la misma dirección". "Nos puede el cortoplacismo. Lo que no puede ser es que el negocio de los distribuidores deje de ser hacer taquilla y volcar todos sus medios en cada una de las películas que estrenan, para ser el estreno de cada vez más películas. Y lo que no puede ser es que las salas de cine no tengan una autorregulación (ya que el Gobierno no interviene de momento) para no tener copada la parrilla en un 80% con el mismo título buscando el mejor resultado de cada fin de semana sin perder un espectador de la película de moda ese fin de semana y no buscar el resultado a medio y largo plazo", lamenta Gutiérrez.