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Análisis

La visibilidad de la salud mental en las series: un mafioso, un presidente y hasta Lucifer

Repasamos algunos de los personajes con puestos de alto rango (o no) que acudieron a terapia en pantalla contribuyendo a una mayor visibilidad de la salud mental en la ficción seriéfila normalizando el hablar de ella sin estigmas

Madrid·Actualizado: 22.03.2023 - 17:53
Tom Ellis era Lucifer Morningstar y acudía a terapia, aunque luego no hiciese mucho caso a su psicóloga i
Tom Ellis era Lucifer Morningstar y acudía a terapia, aunque luego no hiciese mucho caso a su psicóloga i · Fotografía: Netflix

En tiempos en los que el tabú de la salud mental comienza a serlo un poco menos, la presencia de personajes de ficción que piden ayuda profesional cuando su mente lo necesita y que eso se refleje en pantalla con toda la naturalidad del mundo ayuda a abrir la conversación, normalizar el tratamiento y mermar el estigma. Que buena parte del equipo de 'Ted Lasso', con Jason Sudeikis, Brett Goldstein y Hannah Waddingham a la cabeza, se plantase en la sala de prensa de la Casa Blanca para hablar de ello hace solo unos días es una muestra contundente de la trascendencia del asunto, presente en esta ficción de Apple TV+ ambientada en el mundo de fútbol que va mucho más allá de ello. Espoleados por el discurso de Sudeikis, nos hemos asomado a las series y recopilado algunos de esos personajes que han contribuido a normalizar el hecho de ir a terapia.

Si bien Tony Soprano no fue el primero en sentarse en el diván ni David Chase tiene la patente en este sentido, sí que hay que reconocer que aquella primera escena de James Gandolfini y Lorraine Bracco cara a cara supuso cierto antes y después. Corría el año 1999, la década y el siglo iban tocando a su fin, y ‘Los Soprano’ (HBO) entraba por la puerta grande en un mundo de la televisión. Fue el año también de ‘El ala oeste de la Casa Blanca’ (NBC). La serie de Chase y la de Aaron Sorkin comparten más que año de estreno y el hecho de ser dos títulos recurrentes cuando se habla de las mejores series de la historia. Ambas sentaron a sus protagonistas principales, un mafioso y un presidente de los Estados Unidos, en la consulta de un psicólogo/a.

Escenas, más o menos largas o más o menos numerosas, las de Tony Soprano y Josiah Bartlet (Martin Sheen) acudiendo a terapia que, más allá de su poder dramático, mandan un mensaje (intencionado o no) muy claro a la audiencia: no hay nada malo en pedir ayuda cuando la mente dice ‘basta’. Las razones que llevaron a cada uno a ese punto eran distintas y diversas. Un ataque de pánico es lo que empujaba a todo un mafioso autoritario como Tony Soprano a acudir a la consulta de la doctora Melfi. Porque dirigir una organización criminal como la suya genera mucho estrés… amén de sus historias familiares.

 James Gandolfini como Tony Soprano y Lorraine Bracco como la doctora Jennifer Melfi
James Gandolfini como Tony Soprano y Lorraine Bracco como la doctora Jennifer Melfi · Fotografía: HBO

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