Más de 450 creativos, ejecutivos y profesionales de Hollywood judíos firman una carta abierta contra el discurso de Glazer

Las reacciones contrarias al discurso de aceptación del Oscar a Mejor Película internacional de Jonathan Glazer por ‘La zona de interés’ se mantienen vivas días después en el seno de Hollywood. La última crítica ha llegado en forma de carta abierta escrita, indica el texto en su primera línea, por creativos, ejecutivos y profesionales de Hollywood judíos. Manifiestan su oposición a lo dicho por el director alemán en referencia a la situación en Gaza y, a día de hoy, ya han firmado más de 450 profesionales de la industria, entre los que se encuentran la actriz Debra Messing, el director Eli Roth, la productora Amy Pascal y la creadora Amy Sherman-Palladino, entre otros.

En su discurso ante la platea del Dolby Theatre, Glazer declaró al recoger la estatuilla por su película ambientada en el Holocausto, que “todas nuestras decisiones se tomaron para reflexionar y confrontarnos en el presente. No para decir ‘mira lo que hicieron entonces’, sino más bien ‘mira lo que hacemos ahora’. Nuestra película muestra hacia dónde conduce la deshumanización en su peor momento. Ha dado forma a todo nuestro pasado y presente. En este momento, estamos aquí como hombres que refutan que su judaísmo y el Holocausto sean secuestrados por una ocupación que ha llevado al conflicto a tantas personas inocentes. Ya sean las víctimas del 7 de Octubre en Israel o el actual ataque a Gaza, todas las víctimas de esta deshumanización.”.

Las palabras del director alemán han sacudido a la comunidad judía de Hollywood, que, tras declaraciones contrarias y críticas de manera individual, ha decidido expresar su condena en forma de carta abierta. En el texto de la misiva, que puede leerse aquí y cuyo origen, señalan en Variety, no están del todo claro –se desconoce de dónde surge la iniciativa–, rechazan que su “judaísmo sea secuestrado con el propósito de establecer una equivalencia moral entre un régimen nazi que buscaba exterminar a una raza de personas y una nación israelí que busca evitar su propio exterminio. Cada muerte de civiles en Gaza es trágica. Israel no está atacando a civiles. Está apuntando a Hamás. El momento en que Hamás libere a los rehenes y se rinda será el momento en que termine esta desgarradora guerra. Esto ha sido así desde los ataques de Hamás del 7 de octubre”. Y, además, condenan el uso del término “ocupación” en el discurso de Glazer.