Mariëtte Rissenbeek dejará su puesto como codirectora de la Berlinale tras la edición de 2024

Mariëtte Rissenbeek, codirectora de la Berlinale desde el verano de 2019, ha anunciado que dejará su puesto tras la edición de 2024. Tras una reunión con el ministerio alemán de Cultura, la veterana ejecutiva ha asegurado que pondrá punto final a su recorrido en el festival después de dirigir la muestra del próximo año, que ya está preparando junto a Carlo Chatrian. Ambos heredaron el Festival de Berlín de manos del carismático Dieter Kosslick, que lo encabezó durante 18 años, y tuvieron que hacer frente a la reorganización del evento durante la pandemia por coronavirus. Ese es exactamente el cometido de Rissenbeek: capitanear el área organizativa y económica de la Berlinale, formando con Chatrian una dirección bicéfala no muy extendida en los grandes festivales.

Como cita la revista Variety, la ministra germana de Cultura, Claudia Roth, ha lamentado la decisión de Rissenbeek -original de Países Bajos-, pero ha alabado que esto provoque un "cambio generacional" en el liderazgo de la institución. No en vano ha cumplido 67 años. En Deadline se destaca otro fragmento del comunicado del Gobierno, en el que se pone de manifiesto que Mariëtte Rissenbeek "dirigió la Berlinale con una gran dedicación personal, especialmente durante la pandemia de Covid-19, evitando que saliera seriamente dañada". The Hollywood Reporter recuerda que el ministerio todavía está negociando la continuidad de Carlo Chatrian -el codirector artístico, procedente de Locarno- más allá de 2024, y evaluando cómo quedará la estructura organizativa de la muestra.

La edición de la Berlinale 2023, la primera plenamente pospandémica, ha recibido críticas mixtas: por un lado se ha alabado su determinación política, marcada por la guerra en Ucrania y las protestas en Irán; por otro, se ha criticado la falta de definición de su programa cinematográfico, poblado por algunas películas potentes y otras sin el perfil necesario para un festival de categoría A. Rissenbeek, que ahora anuncia su marcha, ha sido clave para la atracción de nuevos patrocinadores a la muestra -como Armany Beauty y Uber-, y ha aportado a la gestión su experiencia como directora de German Films -la institución dedicada a la promoción del cine alemán-, y, anteriormente, como productora de cine y jefa de adquisiciones.