La negociación entre la Unión de Actores y Actrices y la patronal se alarga y no se descartan medidas si no llegan a un acuerdo

El pasado lunes 29 de abril tuvo lugar una reunión de mediación en el SIMA –el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje- para buscar un acuerdo entre la Unión de Actores y Actrices y la patronal del sector (PATE, APCP, PIAF, PROA y Profilm) acerca de la aplicación del IPC a las tablas de 2024, un aumento salarial en base al aumento del 3,1% que aún no se ha producido y que supone, además, un obstáculo para iniciar las negociaciones de un nuevo convenio audiovisual para el sector. Según resaltaron a Kinótico fuentes del sindicato, este es el principal objetivo, un asunto acuciante que aborda asuntos como la inteligencia artificial y que ha quedado aparcado ante el "bloqueo" de la modificación salarial.

En un comunicado enviado esta semana tras las "cinco horas de negociaciones" entre las dos partes, la Unión de Actores y de Actrices ha anunciado que los productores han solicitado un aplazamiento de 15 días para tomar una decisión respecto a la propuesta que han presentado los mediadores. En ella se establece la actualización de los salarios para este año en aplicación del IPC del 3,1%, mientras que para años posteriores se marcan unos límites, de forma que se aplicará salvo que este fuera menor al 1% o superior al 3,85%. La condición para marcar estos límites es garantizar que no se repite "la situación de bloqueo". "El posible acuerdo implica que de manera clara y expresa, a partir de 2025, las subidas deberán acordarse en los 15 días siguientes de la publicación del IPC del año, a finales de enero, sin más trucos", resalta este comunicado.

Lo que este sindicato considera un "punto de partida para desbloquear la negociación" no es, en todo caso, un "cheque en blanco", y lanza un aviso: "En caso de que las asociaciones empresariales no acepten el acuerdo el próximo 13 de mayo, tirando a la basura la posibilidad de centrarnos en los problemas estructurales del sector, nos veremos obligados a incrementar el conflicto laboral, sin descartar medida alguna". Cabe preguntarse si la experiencia de 2023 en torno a las movilizaciones y huelgas de guionistas y actores han dado fuerza a este sector para reclamar justicia con quienes "menos cobran" y a quien "está pegado a convenio y no tiene caché".