El cine latinoamericano sigue en un segundo plano tras los anuncios de Venecia y Toronto

En la maratónica alocución del director artístico Alberto Barbera para dar a conocer la programación de la 81° edición de la Mostra de Venecia, contamos con los dedos – y nos sobraron- las producciones latinoamericanas y los directores latinos convocados al importante certamen italiano. Como dice el dicho, o más bien las madres, "lo importante es estar". Pues, mi gente latina (corrigiendo a JLo), hay que preguntarse también por qué sobran dedos cuando miramos hacia esas industrias cinematográficas, que a pesar de todas sus dificultades, siguen dando muestras de su gran potencia creativa.

Hagamos inventario. Tres latinoamericanos optan por el León de Oro entre 21 títulos que conforman la sección oficial a concurso. Pero la cosa tiene su trampa, no todas son en español. El chileno Pablo Larraín compite con un largo en inglés, ‘Maria’, a diferencia del argentino Luis Ortega, con ‘El Jockey’, y el brasilero Walter Salles con ‘Ainda Estou Aqui’. Los tres largometrajes, representantes de cinematografía punteras en el nuevo continente, corresponden a coproducciones, y hasta este momento no son títulos producidos o que han sido adquiridos por plataformas. Aunque esto último puede cambiar en un santiamén, quizás en este instante mientras estés leyendo estas líneas, y antes de sigas leyendo más sobre estas tres películas que realmente prometen llegar lejos.