Alauda Ruiz de Azúa ('Los domingos'): "Habla de cómo nos empeñamos en mantener la familia, o a costa de qué"

Desde la novedad de su premisa, hasta su sólido reparto, hay pocas películas que vayan a dominar tanto la conversación en su jornada de estreno en el Festival de San Sebastián como 'Los domingos', el nuevo largometraje de Alauda Ruiz de Azúa tras la revelación de 'Cinco lobitos' y la confirmación de la serie 'Querer'. De la mano de Blanca Soroa, Patricia López Arnaiz y Miguel Garcés, la realizadora natural de Baracaldo vuelve a diseccionar las dinámicas familiares en todos sus grises y, como no podía ser de otra forma compitiendo por la Concha de Oro, pasó junto a todo su equipo por el set de Kinótico, patrocinado por Repsol, en el certamen. Allí, y junto a David Martos, la conversación giró en torno a la idea de que una joven del mundo contemporáneo pueda anhelar convertirse en monja, las lagunas de falta de comunicación intrafamiliar que ya se están convirtiendo en sello de autor de la directora o la dimensión de presentar el proyecto en el festival español más importante del año.

"Los domingos son un día dramático para mucha gente. Es el día de ir a comer a casa de la abuela, o de la familia y se siente como una obligación, muchas veces. Son rituales que mantenemos y es verdad que una de las cosas de las que habla es cómo nos empeñamos en mantener la familia, o a costa de qué. 'Los domingos' era un buen título para hacer referencia a eso y al día del Señor, puesto que eso también cuenta mucho para la película", explicó la ganadora del Goya, antes de que interviniera Soroa sobre lo que ha acabado convirtiéndose en su debut en el cine. "Lo recibí con mucha alegría. Me presenté a una prueba en el colegio, de cinco minutos, pensando que era para un papel pequeño (...). Siempre he querido dedicarme al arte en general, pero nunca lo había visto como una posibilidad, sino como un hobbie", confesó la joven actriz, aquí una adolescente de colegio religioso que pone patas arriba a su familia cuando confiesa que quiere entrar en una orden de hermanas de clausura.

También presente en la conversación, su padre en la ficción definió a su personaje: "Una de las pautas era no ser un padre demasiado claro para esa Ainara. Al espectador, le ofrece la oportunidad de dudar, para ver si su vocación es genuina o está motivada por todo lo que sucede en la familia, esa falta de cariño y atención que tiene. O si está inducido por el colegio religioso. El padre puede ser villano o sensato, o todo a la vez. Puede tener dudas", confiesa el actor, antes de que intervenga López Arnaiz, aquí tía de la protagonista y, por momentos, voz de la razón ante lo sorpresivo y precoz del anuncio: "Ella tiene su historia y, mientras, le están pasando sus cosas. Son también dos tipos de amor, uno sacral y perfecto, y otro más terrenal e imperfecto, también más maduro", en relación a la crisis de pareja en la que pilla a su personaje el anuncio del personaje de Soroa.

En una conversación que giró alrededor de las diferencias entre lo racional y lo emocional, los juicios de valor o los recovecos de un guion que nos regala varios duelos interpretativos, fueron los actores los que también se decidieron a hablar sobre Ruiz de Azúa como, quizá, la gran directora de lo estrictamente vasco en nuestro tiempo: "No me hace falta compararla con nadie para saber que es super talentosa, super trabajadora y que es la mejor", apuntó Soroa antes de la intervención de Garcés. "Para mí, es la directora de las oportunidad de hacer cosas que no has hecho nunca. Te llega el guion, que no tropieza en ningún momento. También puedes ensayar, conocer a los personajes, tener un acercamiento con los otros actores y tener claro qué quiere ella. Y, en el rodaje, ella aprieta y aprieta la tuerca. Eso puede ser cansado, pero cuando ver lo que ella consigue... ves que es lo que hay que hacer", completó. "Hace el ejercicio de quitarse los prejuicios e investigar las distintas posiciones, las distintas perspectivas... Y creo que ese respeto viene unido a una inteligencia emocional que consigue que sea una película con aristas, veraz en el retrato de una familia desde las sutilezas", remató López Arnaiz, que un año más no falla en su cita con la temporada de premios firmando una interpretación memorable.