La Incubadora de la ECAM cierra el curso con el proyecto ‘Yo no moriré de amor’ como el más avanzado para comenzar a rodar

A la sexta edición de La Incubadora de la Escuela de Cinematografía y del Audiovisual de la Comunidad de Madrid (ECAM) aún le queda por cerrar algunos flecos con una última sesión programada para el próximo 13 de julio, pero, con el curso ya acabado, es un buen momento para hacer balance de la mano de Rafa Alberola, responsable de ECAM Industria y de este programa de apoyo a largometrajes españoles. Según ha contado a Kinótico, de los cinco proyectos seleccionados para 2023 hay uno que se encuentra en un estado más avanzado de producción y que será el primero que comience a rodarse. Se trata de 'Yo no moriré de amor', dirigido por Marta Matut y producido por Celia Rivas (Solita Films S.L).

Alberola destaca que este guion, que gira en torno a la historia de una joven que ve cómo su vida se paraliza y su sueños se truncan con el diagnóstico de Alzheimer de su madre, “acaba de presentarse al ICAA y de cerrar una coproducción muy interesante tanto a nivel nacional como internacional”. De ahí que el responsable del programa desarrollado por la ECAM crea que este “es el primero que se va a rodar de esta edición”. En cuanto a los otros cuatro –‘Una cabeza en la pared’, ‘Mala gent’, ‘Catorce de marzo’ y ‘¿Es usted secuestrable?’– “están en un estado bastante parecido, han crecido mucho en su aspecto creativo y se están consolidando bastante en el de producción”. Hacer una película, recuerda Alberola, es un proceso largo que lleva su tiempo, pero todos parecen estar colocados en el buen camino.

Los cinco proyectos, que han sido seleccionados teniendo presente esa mirada propia que buscan desde La Incubadora sin olvidarse de una “visión clara de cuál debe ser el recorrido de una película”, acabarán en solo unos días su paso por el programa, pero eso no pone fin a su relación con el mismo. Como remarca el responsable de ECAM Industria, existe un seguimiento. Los directores y productores seleccionados –no hay que olvidar que para ser elegidos uno de los requisitos es que el proyecto tenga guion, director/a y productor/a- serán acompañados en los distintos festivales con los que hay acuerdos para participar en “actividades de industria y fortalecer el networking”. Además de que siempre pueden llamar a la puerta de La Incubadora una vez finalizado el curso, también se les hace un “seguimiento desde el punto de vista de marketing y comunicación en todos los estadios hasta su finalización”.

Volviendo al punto de los festivales, Alberola incide en la importancia de la presencia en estas citas, junto con los laboratorios, para este tipo de producciones, ya que es una forma de encontrar financiación: “Creemos firmemente que la internacionalización de los proyectos es clave a la hora de darles salida, viabilidad y visibilización, sobre todo de puertas para fuera”. Así, por ejemplo, tienen acuerdos con citas imprescindibles de la industria como el Rotterdam Lab o el Torino Film Lab, entre otros.