La geopolítica de Eurimages y MEDIA: ¿puede la inestabilidad privarnos de volver a ganar en Venecia, Cannes o Berlín?

Una pequeña revolución se está cocinando a fuego lento en el seno de la siempre frágil financiación del cine europeo. En apenas unas semanas, han coincidido dos noticias que pueden transformar el panorama inmediato de los productores y distribuidores a la hora de buscar líneas de ayuda económica para sus películas: por un lado, Eurimages -dependiente del Consejo de Europa- abría la convocatoria para formar parte de su comité de expertos; y, por otro lado, el francés Thierry Breton, comisionado de la Unión Europea para el programa MEDIA de Europa Creativa (Creative Europe MEDIA programme, en inglés), presentaba su dimisión por las "presiones" -palabras textuales- que Ursula Von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, habría ejercido sobre su país.

Para no perdernos, conviene primero aclarar dos conceptos. Primero, que el Consejo de Europa (del que depende Eurimages) es una organización internacional que aglutina a casi todos los países que forman parte del viejo continente en su dimensión estrictamente geográfica. Así, incluye a Turquía, Reino Unido o Serbia, que no pertenecen a la Unión Europea (UE), y recientemente expulsó a Rusia por su invasión de Ucrania (información a la que volveremos más adelante). Y segundo, que la Comisión Europea, en cambio, es una institución dependiente de la UE y es la encargada, entre otros menesteres, de ejecutar programas como el MEDIA de Europa Creativa, que aportó 40M€ a las producciones españolas entre 2014 y 2020 (último sexenio con datos).