¿Ya eres parte de Kinótico? Inicia sesión

Sigue leyendo este artículo por solo

0,70€

¡O únete a la comunidad Kinótico con una de las siguientes opciones!

Kinótico Pro

  • 3.99

    / mes

  • 39.99

    / año

Kinótico Industria

  • 9.99

    / mes

  • 99.99

    / año

* Sin compromiso de permanencia. Podrás cancelar cuando quieras

Críticas | Series

‘Fellow Travelers’ juega a mezclar el drama romántico con el thriller político, y la combinación triunfa

La serie protagonizada por Jonathan Bailey y Matt Bomer, que desprenden química, se estrena este domingo en España en SkyShowtime con emisión semanal

Madrid·Actualizado: 15.11.2023 - 05:08
Jonathan Bailey y Matt Bomer protagonizan la serie 'Fellow Travelers'
Jonathan Bailey y Matt Bomer protagonizan la serie 'Fellow Travelers' · Fotografía: SkyShowtime

Hawkins Fuller (Matt Bomer) es un empleado del Departamento de Estado con ambición, buena planta y una carrera prometedora por delante. Tim Laughlin (Jonathan Bailey), un joven idealista y profundamente creyente en Dios, aunque también en el comunismo como enemigo. Ambos son homosexuales en una época, los cincuenta, y un lugar, Estados Unidos, en los que tener relaciones con personas del mismo sexo estaba prohibido y era perseguido por el Estado. Ahí nace el eje de guion sobre el cual orbita ‘Fellow Travelers’. Creada por Ron Nyswaner (‘Philadelphia’) basándose en la novela de Thomas Mallon, la serie se abre, con el drama romántico en el centro, a contar la historia de la comunidad homosexual en el país de las barras y estrellas a lo largo de cuatro décadas repasando los hitos de su lucha y los acontecimientos clave de esos años, incluida la irrupción del sida.

‘Fellow Travelers’ no se esconde y muestra sus cartas, su tono y sus intenciones desde las primeras escenas. La segunda, o puede que tercera, muestra una relación sexual bastante explícita. A partir de ahí, habrá muchas más. Sirven, entre otras cosas, para trazar el perfil y la psicología de los dos personajes principales. A Hawkins se le muestra, de entrada, como alguien que sabe lo que quiere y lo toma y lo suelta sin comprometer su imagen de cara a la galería política en la que quiere ascender. Tim, sin embargo, irradia inocencia, idealismo y una lucha interior constante con su fe y lo que esta le dice que es pecado ser. La relación que se establece desde el inicio entre ambos –se ve venir– es desigual: el joven protegido que se siente deslumbrado y atraído por el maestro. En la relación de Tim y Hawkins, que empieza como meramente sexual, acaban entrando los sentimientos, pero también la toxicidad.

"Las escenas de sexo sirven para trazar el perfil psicológico de los dos personajes principales"

También te puede interesar