Entrevista | Festival de Sevilla

Emma Suárez: "Los premios, los Goya, para lo que deben servir es para apoyar nuestro cine"

La actriz protagoniza 'Desmontando un elefante' junto a Natalia de Molina, madre e hija separadas por la adicción en la ópera prima de Aitor Echevarría

Sevilla·Actualizado: 12.11.2024 - 06:30
Emma Suárez, Aitor Echevarría y Natalia de Molina, equipo de 'Desmontando un elefante', a su paso por el set de Kinótico en el Festival de Sevilla
Emma Suárez, Aitor Echevarría y Natalia de Molina, equipo de 'Desmontando un elefante', a su paso por el set de Kinótico en el Festival de Sevilla · Fotografía: Kinótico

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Manuel Cristóbal, director del Festival de Sevilla, expresaba en Kinótico su intención de "ser útil" al cine español que busca su hueco en la cartelera en los últimos meses del año o en los primeros del próximo. Ese es exactamente el caso de 'Desmontando un elefante', ópera prima de Aitor Echevarría que se estrena el 10 de enero de 2025 y un vehículo de lucimiento interpretativo para sus dos actrices protagonistas: Emma Suárez y Natalia de Molina. Madre e hija en la ficción, junto a su director, pasaron por el set de Kinótico en la capital hispalense para hablar sobre una película que lidia con las adicciones desde un punto poco antes visto en la ficción, el de la maternidad. La película, áspera, epatante y sufrida desfila por la pantalla sincera y contenida, agarrándose a la danza para que el dolor sea vehículo sentimental en una historia llena de dolor.

"Hemos tratado de retratar a la familia de una manera compleja, donde no hay buenos ni malos. Ahí tratamos una situación aparentemente positiva, como es la recuperación del alcoholismo de uno de sus miembros, pero eso hace que toda la familia tenga que cambiar de posición", explica el realizador, que debuta tras una brillante carrera en el cortometraje y décadas de experiencia siendo parte de producciones como 'María (y los demás)' o 'La voluntaria'. Con tres Premios Goya a un lado y dos a otro, la conversación fluye: "Es una mujer ya adulta que necesita reconstruir su identidad. Sale de un centro de adicciones y se encuentra con un increíble vacío, ha de cambiar absolutamente todos los hábitos. Ha sido un trabajo muy interesante, porque me ha abierto la ventana a esta enfermedad, a ver cómo de mal lo pasan y cómo de mal lo pasan sus familiares", explica Suárez sobre el personaje protagonista.

"Me gusta mucho cómo la película muestra que el arte, en este caso la danza, sirve para expresar cosas que en tu día a día no puedes" (Natalia de Molina)

A su lado, De Molina como hija sufrida, describe el proceso interpretativo por el que pasa su personaje, dividido entre la culpa de no abandonar a su madre cuando más la necesita y una vida profesional, y artística, que le demanda toda su atención: "[La adicción] es una enfermedad contagiosa, no afecta solo al que la sufre, sino a todo su entorno. Mi personaje tiene una codependencia muy grande. Si ya de por sí es difícil convivir con esta enfermedad en cualquier ámbito, imagínate con tu propia madre", apunta la actriz, y sigue, sobre las alegorías del filme: "Me gusta mucho cómo la película muestra que el arte, en este caso la danza, sirve para expresar cosas que en tu día a día no puedes. Eso lo comparto", añade.

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"Es inevitable que habrá espectadores que entren en conflicto. Cada espectador puede acercarse a uno u otro miembro de la familia. Más allá de eso, lo importante de la película me parecía hacer entender lo que sufren estas personas. Conocer un poco. Es una película que aborda este tema desde un punto de vista que no se ha tratado antes. Siempre vemos al alcohólico bebiendo, y aquí lo que se cuenta es la reconstrucción de alguien perdido, que no sabe quién es. Eso sí nos puede acercar al personaje", reflexiona Suárez, sobre su personaje y sobre el elefante del título, metáfora de aquello de lo que no se habla pero se percibe de manera obvia.

Con la temporada de premios recién puesta en marcha, dando fe de ello las mesas redondas de Kinótico, cabe preguntar a las protagonistas de 'Desmontando un elefante' por un camino que ya les es familiar: "Cada uno lo siente de una manera. A mí, personalmente, me gusta contar historias, me gusta hacer películas y me gusta este oficio. Más allá de los premios, lo importante es trabajar con compañeros y compañeras con los que te sientas a gusto, en los que creas, y luego que se vean las películas. Si te dan un premio, ya es maravilloso. ¿Qué le diría a la gente? Que siga su intuición, que siga su impulso, y que en la medida de lo posible defienda lo que hace y lo haga de verdad", explica Suárez, antes de que intervenga su compañera de reparto. "Los revelación o los de dirección novel son los premios más bonitos que hay, solo te pueden pasar una vez en la vida y son tu entrada al mundo este, a que te pongan nombre y a que sepan quién eres", apunta risueña Natalia de Molina. Antes de despedirse, una última reflexión de Suárez: "Los premios, los Goya, para lo que deben servir es para apoyar nuestro cine. Para dar salida a gente que está empezando, o películas que no han tenido una buena promoción o proyección sean nominadas y la gente se fije en ellas".

Fotograma de 'Desmontando un elefante', protagonizada por Emma Suárez, Natalia de Molina y Darío Grandinetti
Fotograma de 'Desmontando un elefante', protagonizada por Emma Suárez, Natalia de Molina y Darío Grandinetti · Fotografía: FILMAX

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