Cinema Pendent: el programa de l'Alternativa que busca nuevos talentos en el cine independiente

La iniciativa Cinema Pendent nació en 2013 en el marco del Festival de Cine Independiente de Barcelona, l’Alternativa, como un lugar en el que creadores y productores de proyectos en desarrollo podían resolver sus dudas y dar a conocer sus futuras obras. Este espacio, que se inserta en el l’Alternativa PRO -la sección dedicada a los profesionales del cine independiente del certamen- da la posibilidad de impulsar el desarrollo de proyectos y sirve como plataforma para dar visibilidad a proyectos con un perfil arriesgado o con un concepto original, y que encuentran en esta cita la vía perfecta para lograr convertirse en realidad y contar con el camino para llegar al público. Este programa cuenta con seis líneas: Laboratorio de desarrollo (proyectos de largometrajes de ficción o híbridos en desarrollo), Corto y cierro (proyectos de cortometrajes), Mentoring projects (proyectos de largometraje de no ficción o experimental), Mentoring Acció>Cinema Pendent (proyectos de largometrajes y cortometrajes de carácter social vinculados o con necesidad de vinculación con una ONG) y Proyecciones WIP (proyectos de largometrajes en posproducción), cuyas convocatorias se abrieron el pasado 8 de mayo y se cerrarán el 30 de junio, así como EXTREMELAB, que da cabida a proyectos de largometrajes vinculados a escuelas y universidades, cuyo plazo se mantendrá abierto hasta el 15 de julio.

Las diferentes convocatorias están dirigidas a directores, productores y guionistas, no existe un límite en el número de proyectos presentados y pueden haber participado en otros laboratorios, residencias o foros de coproducción. Además, entre las condiciones destaca como requisito la inexistencia de una fecha prevista de estreno (ni tampoco haberse estrenado ya). La valoración se llevará a cabo por parte de un comité de selección que valorará, entre otros aspectos, el riesgo y la singularidad, la originalidad de la historia, un presupuesto adecuado, la carrera incipiente del creador, la paridad de género del equipo, el uso de lenguas cooficiales o la relación del proyecto con Cataluña o Extremadura.

La productora, cineasta y gestora cultural Patricia Sánchez, impulsora de este programa, ha explicado en declaraciones a Kinótico que este espacio nació como una “excusa” para organizar jornadas y comidas y compartir así los proyectos en los que cada uno estaba involucrado, y aprovechar también las visitas de las que se enriquecía l’Alternativa PRO. Con los años, y aprovechando la experiencia y el conocimiento de “qué sale bien y qué sale mal”, el programa ha madurado hasta convertirse en un lugar imprescindible en la creación de cine independiente, que en un primer momento contó con la ayuda del Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales (ICAA) y que ahora cuenta con el apoyo del Institut Català de les Empreses Culturals (ICEC).

Cinema Pendent busca profesionalizar las diferentes etapas de los proyectos audiovisuales a través de la innovación, la vertebración de redes, el estímulo y la ayuda para llegar a públicos potenciales, a través del intercambio de conocimientos entre los expertos y los participantes, el descubrimiento de nuevos modelos de distribución y de 'marketing', el asesoramiento de los nuevos modelos de negocio, la gestión de la propiedad intelectual y la capacidad para la financiación o las herramientas fiscales, o la tutorización de proyectos de carácter autoral y experimental en su primera fase de desarrollo de creadores y productores. En 2024, participaron proyectos tan interesantes -y de los que pronto seguro tendremos noticias- como 'Ese lugar inexistente', de Alejandro Alonso y Alejandro Pérez, o 'Al rojo vivo', de Rocío Llambí.

Seis programas para descubrir talento

Por programas, Sánchez ha explicado que en Mentoring Projects, una de sus líneas destacadas, en la que participan productores, guionistas y directores, se selecciona un total de cinco proyectos de largometraje de no ficción o experimental en fase de escritura que participarán en un programa de un año, coordinado por Gabriela Lacob. En el caso del Laboratorio de desarrollo, se seleccionan cuatro proyectos de ficción, híbridos o experimental y, al margen de su desarrollo durante la duración de l’Alternativa, con el objetivo de que en abril se vuelva a trabajar en ellos para presentarlos a instituciones o productoras, y conseguir así la financiación. En el caso de Extremlab, se seleccionan cinco proyectos entre cortometrajes y largometrajes de ficción, no ficción, híbrido, animación o experimental, realizados por creadores emergentes en relación con una escuela de cine o audiovisual y que sean obra de estudiantes de diferentes zonas geográficas.

Con un marcado acento social destaca Mentoring Acció>Cinema, una convocatoria dirigida a proyectos con “mucho carácter social” para intentar que ONGs y cineastas “puedan ir de la mano para realizar esos proyectos que normalmente tiene que ver con la injusticia y con las diferencias entre norte y sur global”. Corto y cierro, por su parte, engloba cuatro proyectos seleccionados de cortometraje. Todas estas líneas se desarrollan durante diez días en los que se da la oportunidad de “conocerse”. “Cuando leo los proyectos o cuando voy a festivales y hablo con la gente interpreto que hay unas necesidades o cosas que a mí me pasan como productora”, cuenta Patricia Sánchez sobre esta iniciativa, que celebra este año su decimotercera edición.

Cinema Pendent puede presumir, según destaca su responsable, del “cariño” con el que se lleva a cabo, algo que se percibe en otros viajes, donde no siempre se cuida al creador. “Esto viene acompañado de saber qué tutores son los mejores para los proyectos”, añade sobre el programa Mentoring, donde se crea una “hermandad”. Los motivos por los que este programa se puso en pie siguen siendo los mismos, aunque lo cierto es que convive con otros laboratorios y residencias, fruto de una evolución a nivel mundial. No obstante, se sienten “pioneros” en este campo, en el que contribuyen a “descubrir nuevos talentos” que, “o bien les coges de la mano y les acompañas o puede que se queden sin nada”. “Como productora, creo que lo más importante es que nadie sienta que está perdiendo el tiempo, que es lo más caro”, concluye Sánchez, que alaba la convocatoria de becas del ICEC en algunos programas para permitir la participación de quienes tienen que dejar de lado otros trabajos.