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Festival de Cannes

Quentin Tarantino: “La violencia tiene un límite que no voy a traspasar en mi cine: la muerte de animales, incluso de insectos”

El director de ‘Pulp Fiction’ ha dado una clase magistral, con proyección incluida de ‘El ex-preso de Corea’, en el marco de la Quincena de Cineastas en Cannes

Cannes·Actualizado: 26.05.2023 - 04:32
Quentin Tarantino prepara la preproducción de su supuesta última película
Quentin Tarantino prepara la preproducción de su supuesta última película · Fotografía: Gtres / Bestimages

La noche que ‘El ex-preso de Corea’ (John Flynn, 1977) se estrenó en Los Ángeles, Quentin Tarantino (Tennessee, Estados Unidos, 1963) se encontraba entre el público en una sesión doble con su madre y su padrastro. La película que lo inició en la cinefilia no estaba, sin embargo, en su radar. La salida familiar al cine era, en realidad, para ver ‘Operación dragón’ (Robert Clouse, 1973), porque el futuro director se encontraba entre los pocos compañeros de clase que todavía no habían visto el hoy clásico de las artes marciales protagonizado por Bruce Lee.

“Me la habían contado tantas veces que sentí como si ya la hubiera visto. Me gustó, por supuesto, pero me sentí decepcionado. También porque ya me había reído con ‘Por un puñado de yenes’, la parodia que John Landis había hecho en su película de sketches ‘Made in USA’ (1977). Luego empezó la proyección del segundo largometraje de la noche y todo mi desencanto se evaporó”, ha compartido el realizador de ‘Érase una vez en... Hollywood’ (2019) durante una clase magistral en el Festival de Cannes como invitado especial de la Quincena de Cineastas.

Tarantino ha aprovechado el encuentro para programar este título de serie B en película de 65 milímetros, para regocijo del público, al que ha animado a aullar, gritar y expresar su emoción como si estuviera asistiendo a una proyección en un cine estadounidense y no francés. Al respetable tampoco es que le hiciera falta ese empellón, porque ya venía de casa con ganas de bullicio. De hecho, las entradas para este pase se agotaron hace días y las colas que daban la vuelta a la esquina aguardaban por la posibilidad, por pequeña que fuera, de conseguir acceso caso de que hubieran bajas entre las reservas.

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