Marta Romero, directora de 'Toda una vida': “No quise hacer una historia sobre el alzhéimer, esta es una historia de amor”

Paco y Trini pasaron más de 60 años juntos. Es decir, ‘Toda una vida’, que es como se llama la película de su historia. Esa que, durante 12 años, fue recogida por la cámara de su nieta y que, tras su paso por el D'A Film Festival de Barcelona y su estreno internacional en el Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias (Colombia), llega esta semana a Filmin. Un documental de poco más de una hora de duración que supone el debut en el largo de su directora, Marta Romero, quien cuenta a Kinótico que nunca tuvo la intención de rodar “una historia de alzhéimer”, sino “una historia de amor”, la de su abuelo hacia su abuela.

El germen de ‘Toda una vida’ se encuentra en una visita a su pueblo, Bernicarló. Corría el año 2010, su abuela ya tenía el diagnóstico de la enfermedad y Marta Romero, entonces una estudiante de comunicación Audiovisual en Barcelona de 20 años, empezó a grabar la vida cotidiana de sus abuelos y otros familiares. Todo empezó como algo muy casero, familiar. “Vi que podía haber una película cuando descubrí al personaje de mi abuelo y apareció más esa historia de amor. Después, cuando cogen el proyecto en un laboratorio y entra la productora, todo se profesionaliza un poco más”, resume sobre cómo fue el proceso de descubrir que en esas grabaciones se encontraba una historia que contar, una película.

Aunque ha sido un proceso largo, de 12 de años de grabación, Romero reconoce que no ha sido un proyecto de esos en los que tienes que “picar muchas puertas”. Una vez que fue seleccionado para el laboratorio y entró la productora, “fue relativamente rápido”. De ahí que se sienta “afortunada”, porque no suele ser lo habitual en la industria con una primera película. El tiempo dilatado en su caso tiene que ver con la propia naturaleza de ‘Toda una vida’, documental para el que llegó a tener más de 250 horas de grabaciones. Eso implicó casi tres meses “solo de visionado con la montadora". De entrada descartaron aquellas imágenes en las que “a mi abuela se la ve bastante vulnerable”. Eso, cuenta, dejó mucho material fuera. Y luego se ajustaron a su deseo de contar una historia: “Hay muchas cosas que te gustan y que se tienen que quedar fuera”.

Así llegaron hasta ‘Toda una vida’, la historia de amor de Paco y Trini, en la que el protagonista es el abuelo de la directora, un hombre que se volcó en cuidar a su esposa enferma, “un señor que la cuidó hasta el final, que con pequeños gestos él seguía y le mostraba este amor incondicional”. Y eso era lo que quería contar, una historia de amor en la que “la enfermedad es un tema transversal que está ahí”, pero no es lo principal.

El documental está construido a base de recuerdos, de recortes fotográficos, de escenas cotidianas, de conversaciones, de pequeños gestos… y en él no solo son protagonistas este matrimonio de Benicarló y su nieta, sino toda la familia. Esa que, explica Marta Romero, ya ha visto la película. Lo han hecho en varias ocasiones. Una, muy emotiva, fue durante una proyección al aire libre en agosto, durante las fiestas del pueblo, junto a más de un millar de personas y con la banda municipal tocando en directo. Porque, apunta la directora, “la banda municipal es la que interpreta la banda sonora y fue muy emotivo”. Además, su familia la acompañó en su paso por el D’A en Barcelona, donde Dani Mantilla también pudo hablar con ella.

Al ver su película, construida con todo ese material que fue recopilando a lo largo de los años, una de las cosas que más emociona a su directora es escuchar la voz de su abuela. Porque durante sus últimos años, pese a seguir con ellos, ya no hablaba. Para ella el proceso ha sido algo catártico: “Hablo desde mi experiencia, a mí me ayudó a estar cerca de mi abuela de otra forma, a entender esa enfermedad también y, como decía Baudelaire, a ver que de las cosas malas a veces nacen las cosas más bellas. Poder ver a mi abuelo o poderlos verlos juntos en esos momentos, a día de hoy me emociono, porque me vienen imágenes de ellos dos juntos”. Un poder catárquico, el del cine, en el que confía y que ha podido sentir también en espectadores de su documental que se lo comentan tras los pases.

Pasado y futuro de Marta Romero

Antes de hacerse un hueco en el panorama nacional con ‘Toda una vida’, Marta Romero estrenó el corto ‘Facunda’, disponible también en Filmin. Una historia que tiene poco que ver con su documental –está contada en “clave cómica”–, pero con el que sí comparte dos puntos. El primero es que su protagonista, la que le da título, también es un familiar. “Es la hermana de mi abuela”, aclara. El segundo es que también cuenta con personajes en su vejez: “Mi abuela prácticamente me crió con mi madre y tengo mucha cercanía con la gente mayor. Colaboró en Barcelona con varias entidades que luchan contra la soledad no deseada de la gente mayor y realmente es que yo me divierto mucho, o sea, me gusta tener amigos muy mayores y conversar con ellos. Me parece enriquecedor”.

Y tras 12 años dedicados a un mismo proyecto, ¿qué tiene ahora en mente Marta Romero? “Estamos todavía una fase muy embrionaria, pero sí que estamos investigando algo nuevo, un poco híbrido entre documental y ficción. Pero vamos a ver… porque todavía es un borrador de borrador de borrador”.