Christophe Honoré sobre 'Marcello mio': "Hacer un biopic de Marcello Mastroianni se sentía como una especie de traición"

"La identidad, la verdadera identidad de un actor, es un tema muy estimulante", sostiene Christophe Honoré respondiendo a la primera pregunta de la prensa de presentación de su última obra. De hecho, sobre eso versa 'Marcello mio', que se pudo ver ayer en el Festival de Cannes y cuyo equipo de rutilantes estrellas de un avezado cine europeo se ha encontrado con los medios de comunicación, en un ambiente que no disimulaba lo mucho que puede deslumbrar tener a alguien como Catherine Deneuve o Chiara Mastroianni a un palmo.

"Siempre me parece muy complicado describir el momento en que nace una obra", cuenta el director sobre cómo nace una historia tan particular como la de su última película. 'Marcello mio' cuenta una curiosa etapa de la vida de Chiara Mastroianni, que se interpreta a sí misma, aunque no del todo. Durante cierto tiempo, la actriz empieza a dar vida a su padre, a vestirse como él y a pedir a los demás que se dirijan a él como si fuese Marcello Mastroianni. Esto altera la vida de quienes la rodean, especialmente la de Catherine Deneuve, que también se da vida a sí misma, y que descubre como el hombre con quien tuvo a Chiara, en cierta manera, sigue vivo a través de ella. "He tenido infinidad de conversaciones sobre la profesión y la identidad del actor con Chiara, y creo que fueron esas conversaciones las que me llevaron a escribir este guion".

"Un guion", replica Chiara en rueda de prensa, "que me llegó después de haber aceptado hacer esta película, lo cual no deja de ser extraordinario". "Nos planteamos", sigue Honoré, "qué es lo que ocurre cuando dedicas tu vida a dar vida a otra gente, dónde queda la identidad propia cuando te dedicas a dar vida a otras muchas identidades, y de ahí surgió poco a poco el film". Es la sexta ocasión que Honoré y Mastroianni trabajan juntos. Han coincidido en películas como 'Haciendo planes para Lena', 'Hombre en el baño', 'Las canciones del amor' y 'Habitación 212'. Ni siquiera es la primera vez que madre e hija trabajan las dos a las órdenes de Honoré, pues ya lo hicieron en 'Les Bien-Aimés'.