El ICAA anuncia en Málaga que negará el certificado cultural a las obras creadas íntegra y exclusivamente a través de la IA

La inteligencia artificial es una de las grandes preocupaciones de la industria audiovisual en 2025. El cine español no es una excepción, como ha dejado claro un evento celebrado el domingo en el marco del Festival de Málaga y organizado por AECINE en el que se ha abordado el lugar de la ética en el auge de la IA en el cine en particular y el audiovisual en general. María Luisa Gutiérrez, presidenta de la Asociación Estatal de Cine y CEO de Bowfinger International Pictures, ha sido la encargada de moderar una charla en la que han intervenido Ignasi Camós, el director general del ICAA; Clara Ruipérez de Azcárate, directora de estrategia jurídica de contenidos de Telefónica; y Eduardo Jiménez, socio fundador de Free Your Mind y productor de Quexito Films.

Durante una de sus intervenciones, el máximo responsable del ICAA ha anunciado en primicia que “en la próxima orden de bases ayudas generales someteré al sector la inclusión en el certificado de culturalidad, y es algo que no solo va a afectar a los que vienen directamente a ayudas del ICAA. Vamos a incluir la necesidad de presentar junto a la solicitud una declaración responsable por la que se manifieste que la obra no ha sido creada íntegramente y exclusivamente por inteligencia artificial”. Camós ha defendido el uso de la IA, pero ha insistido durante sus intervenciones en que debe ser controlado, reportado y de conocimiento público. Ya en junio de 2024, Camós reconocía en una entrevista con Kinótico que la IA debería estar presente en la Ley del Cine, un proyecto que aún sigue en el aire y que no fue mencionado durante el encuentro moderado por la productora de ‘La infiltrada’.

Camós apuntó a que se seguiría con especial interés el trabajo de los guionistas: “Vamos a utilizar un mecanismo de inteligencia artificial para controlar que lo que nos presentan no está hecho con inteligencia artificial. Hay una herramienta que te dice si más del 60 o 70% de un guion se ha creado con una inteligencia artificial. Yo vengo del mundo de la universidad y hay herramientas que ya te permiten detectar eso. Con ellos vamos a ir un paso más adelante y a hacer un control más exhaustivo del uso de la IA porque en los sistemas de escritura es mucho más fácil detectar el uso de inteligencia artificial que en los procesos de producción, por ejemplo”. María Luisa Gutiérrez reconoce que “os escucho y me asusto, porque como usuario me veo muy débil. Tengo que dar fe de algo que no sé o no puedo controlar. No sé cómo utilizan el After Effects o el 3D. Técnicamente no estoy cualificada para saber más sobre eso, pero queda claro que a partir de ahora hay que incluir una cláusula a los guionistas donde estos se comprometan a no usar la IA íntegramente”.