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Streaming

La purga de series y películas en las plataformas de streaming representa el fin de una era

Disney+ anuncia nuevos títulos que borrará de su servicio para ahorrarse impuestos mientras los expertos se preguntan cómo se ha llegado hasta aquí

Madrid·Actualizado: 07.06.2023 - 13:04
'Willow' es una de las series eliminadas de Disney+ para ahorrar costes.
'Willow' es una de las series eliminadas de Disney+ para ahorrar costes. · Fotografía: Disney

El primer aviso lo dio Netflix cuando, en la primavera del año pasado, anunció que perdía suscriptores por primera vez en su historia. El inevitable pánico posterior de Wall Street ya mostraba lo que iba a ocurrir en este último año: la burbuja del streaming ha explotado. A finales de 2022, y como una de las primeras medidas de los nuevos jefes de Warner Discovery, un buen puñado de títulos eran eliminados de HBO Max para conseguir ciertos beneficios fiscales. Esas series (incluida una de gran presupuesto como ‘Westworld’) acabaron licenciadas a terceros, ya fueran canales FAST u otras plataformas, tipo SkyShowtime en España, y no serían las únicas en sufrir ese destino.

Disney+ está a punto de acometer su segunda purga de series de su catálogo con el mismo objetivo, y dentro de una política de austeridad del CEO de la empresa, Bob Iger, que llevó a que desaparecieran en primera instancia producciones propias de la plataforma como ‘Willow’, ‘El mister’ o ‘Somos los mejores’. Únicamente las series de Marvel y Star Wars parecen intocables.

La huelga de guionistas surge como reacción al modelo de negocio implantado por el streaming

El recorte estricto de gastos se ha instalado en unas compañías que, para competir entre ellas y lograr el objetivo deseado por Wall Street (el crecimiento sostenido en nuevos suscriptores), gastaron miles de millones de dólares en contenido original, creando la ilusión de que había más variedad de títulos y mucho más trabajo para más voces diferentes en Hollywood. La ilusión tenía su parte de verdad, pero en cuanto los accionistas vieron que el mero aumento de abonados no daba beneficios, se pasó a otra métrica para medir el rendimiento de las plataformas: la rentabilidad de sus contenidos y sus usuarios.

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