Kevin Spacey reaparece en Cannes, emocionado y sin respaldo de Hollywood, para recibir un premio honorífico

Kevin Spacey ha vuelto, aunque en realidad nunca se fue del todo, y lo ha hecho en el marco del Festival de Cannes y para recibir un premio. Anoche, en el Carlton Beach, el ganador de dos Oscar subió al escenario, arropado por Manuel Collas de La Roche, presidente y fundador de la Gala del Better World Fund, para recoger el premio Excellence in Film como plato fuerte de una ceremonia en la que no hubo mucha estrella del celuloide, pero sí un buen puñado de periodistas interesados en el discurso de Spacey. Este, que reconoció que es "es agradable estar de vuelta”, agradeció a los organizadores del evento su llamado. ”Quién iba a pensar que honrar a alguien que ha sido exonerado en todas las salas de juicios a las que ha entrado se consideraría una idea valiente”, dijo en su discurso de agradecimiento al recoger la estatuilla.

Spacey, que en el pasado recibió varias acusaciones de conducta sexual inapropiada de las que fue declarado inocente tras una demanda presentada en Nueva York en 2022 y absuelto por un jurado de los cargos de agresión sexual en Londres en 2023, vio cómo cuando estalló el escándalo su nombre se caía de carteles y dejaban de llamarle de grandes producciones.

Ahora, desde Cannes y recogiendo un premio a su trayectoria, ha mandado un mensaje a la industria cargado de dardos y recortando la lista negra en la que estuvo el guionista dos veces ganador del Oscar, Dalton Trumbo, quien había estado en ella entre 1947 y 1960, durante el macarthismo. “He aprendido mucho de la historia; a menudo se repite. La lista negra fue un momento terrible de nuestra historia [que debemos recordar] para que no vuelva a ocurrir”, ha sentenciado en una intervención en la que se acabó emocionando y en la que también dio las gracia a su representante y amigo Evan Lowenstein, sentando entre los asistentes.