Marie-Ange Luciani: “Justine Triet es un ejemplo de la excepción cultural que está en peligro por políticas culturales neoliberales”

Durante su discurso de agradecimiento por la Palma de Oro gracias a su cuarto largometraje como directora, ‘Anatomía de una caída’, Justine Triet quedó atrapada en el centro de la polémica después de denunciar que “la mercantilización de la cultura que este gobierno defiende está acabando con la excepción cultural francesa”. La ministra de Cultura de Emmanuel Macron, Rima Abdul Malak, reaccionó en Twitter felicitando a la ganadora y tildando de “injusto” sus comentarios. “Esta película nunca hubiera nacido sin el modelo francés de financiación del cine, que permite una diversidad única en el mundo”, sentenciaba Abdul Malak. Meses después, Triet prefería no hablar de la controversia durante su visita al Festival de San Sebastián. Su productora, Marie-Ange Luciani, accedió a contextualizar sus palabras.

“El ejemplo de Justine Triet representa precisamente esa excepción cultural a la que hacía mención en ese discurso”, explica la productora ganadora del César por ‘120 pulsaciones por minuto’. Luciani cree que la trayectoria de la directora de 45 años es un caso modelo para el sistema audiovisual francés con el que el resto de industrias sueñan. “Justine pasó de hacer una primera película [‘La batalla de Solferino’, estrenada en 2013] con la que vendió simplemente 50.000 entradas. Al cabo de cuatro películas ha vendido más de un millón en menos de un mes y se ha llevado la Palma de Oro. Gracias a esa excepción cultural pudo fracasar en un momento dado y recuperarse hasta alcanzar un gran éxito”.

Luciani está preocupada por la sustancial pérdida de espectadores en las salas francesas, aunque celebra que los números de entradas vendidas hayan crecido en los últimos meses antes de volver a hablar de la excepción cultural. “Tenemos que seguir estando vigilantes y tener mucho cuidado porque somos unos privilegiados. Tenemos un sistema que no existe en España, por ejemplo, y muchísima gente nos tiene envidia por ello. Hay que tener cuidado, porque se están aplicando políticas culturales demasiado neoliberales”.

La relación entre la productora y la directora se remonta mucho antes de ‘Anatomía de una caída’. “Nos conocemos desde hace muchísimo tiempo y éramos amigas de antes”, confiesa antes de reconocer las exigencias de Triet. “Justine escribió la película con su pareja, Arthur Harari, durante mucho tiempo, casi un año. También nos pidió mucho tiempo de rodaje y de postproducción. Al final mereció la pena”.

La única piedra en el camino de este triunfal regreso del cine de juicios llegó cuando Francia apostó por otra película, ‘A fuego lento’, de Anh Hung Tran, como representante en la próxima edición de los Oscar. “Fue una gran decepción”, admite Luciani. No puedo ocultar el disgusto de no poder llevar una película como esta a los Oscar. La película está funcionando muy bien allá por dónde va, pero hay un comité que es el que elige y que es soberano. No me queda otra que aceptar su decisión. Espero, eso sí, que le vaya bien a la película elegida”.

A pesar de la controvertida decisión tomada al otro lado de los Pirineos, ‘Anatomía de una caída’ ha empezado de forma triunfal su recorrido en la temporada de premios anglosajona gracias a sus premios en la crítica de Nueva York, los Gotham y los premios del cine independiente británico. Neon, la distribuidora de la película en Estados Unidos y Canadá, solo tardó unos minutos en confirmar que haría campaña por la película en el resto de categorías. “Pase lo que pase estará bien”, concluye la productora.

Rodar 35 años después en Madagascar

‘Anatomía de caída’ es la segunda producción que llega a los cines españoles en los últimos meses. La primera fue ‘La isla roja’, la incursión en la autoficción de Robin Campillo. “La verdad es que es la tercera película que hacemos juntos”, relata una productora que conoció al cineasta justo antes de colaborar juntos por primera vez haciendo ‘Eastern Boys. “Con ‘120 pulsaciones por minuto’ fue cuando se afianzó nuestra relación, tanto de trabajo como de amistad”. Los mayores retos llegaron con su tercera película. “No fue nada fácil ir a rodar a Madagascar. Hacía 35 años que ningún equipo de rodaje rodaba allí en la isla. Fue muy difícil conseguir las autorizaciones para poder hacer la película allí, pero al final nos dieron los permisos”, destaca Luciani.

‘La isla roja’ está inspirada por los recuerdos de infancia del director de orígenes españoles, cuando el trabajo de su padre les llevó a él y a su madre vivir en una base militar en un momento de transición clave en la relación entre Francia y una de sus colonias, Madagascar. “Para Robin era esencial que se rodara allí porque la película tenía un componente autobiográfico muy importante. La base militar en la que vivió todavía existe. La casa donde vivieron sus padres también sigue en pie”. Como tantas otras películas de los últimos años, la producción se vio afectada duramente por el COVID. “Tuvimos que aplazarlo todo casi un año, pero conseguí fletar un vuelo especial y en ese avión metimos a 67 personas, entre técnicos y actores y actrices. Nos fuimos a Madagascar en un vuelo de ida sin saber cuándo íbamos a poder volver ni cuándo abrirían los aeropuertos. Por suerte, todo se resolvió al cabo de tres semanas después de estar allí”.

Siguiente proyecto: una versión femenina de 'Una historia de violencia'

A pesar de que sigue involucrada en la campaña de promoción de ‘Anatomía de una caída’, la productora ya está trabajando en un nuevo proyecto a través de su compañía, Les Films de Pierre. El 13 de octubre ScreenDaily completaba una información adelantada por Kinótico. Luciani está detrás de la nueva película de Léa Mysius, la directora de ‘Los cinco diablos’. El proyecto se basa en una novela de Laurent Mauvignier, editada en francés bajo el nombre ‘Historias de la noche’ y en inglés como ‘La fiesta del cumpleaños’.

Ambientada en una aldea de la Francia rural, la historia sigue a un hombre y su esposa, su hija y un vecino artista. Mientras el hombre planea una sorpresa para el cumpleaños de su esposa, sucesos inexplicables comienzan a perturbar la tranquila existencia de la aldea antes de convertirse en una cadena de acontecimientos de pesadilla cuando cae la noche. "Es una versión femenina de 'Una historia de violencia', de Cronenberg", dijo Luciani a Screen. Está previsto que la cinta empiece a rodarse en mayo de 2024, con vistas a un posible estreno en Cannes al año siguiente. ‘Ava’, el debut de Mysius, ganó el premio SACD en la Semana de la Crítica de 2017. Cinco años después, ‘Los cinco diablos’ tuvo su premiere mundial en la Quincena de cineastas.