Entrevista

Carla Simón: "Ha sido muy bonito utilizar el cine en 'Romería' como herramienta para crear aquellos recuerdos que no tengo"

Hablamos con la directora a 24 horas del debut en Cannes de 'Romería', la película que cierra la trilogía sobre su familia y con la que aspira a la Palma de Oro

Cannes·Actualizado: 21.05.2025 - 14:55
La directora Carla Simón, tras su entrevista con Kinótico en Cannes 2025 por 'Romería'

Entrevista en Cannes 2025 con Carla Simón por 'Romería'

00:00
La directora Carla Simón, tras su entrevista con Kinótico en Cannes 2025 por 'Romería' · Fotografía: Kinótico

Cuando se sienta frente al micrófono de Kinótico, faltan casi 24 horas para la primera proyección en Cannes de la tercera película de Carla Simón. “Estamos un poco nerviosas, pero muy emocionadas”, reconoce a David Martos la directora y guionista de 38 años. “Aparte de porque vamos a subir esta escalera mítica por la que ha pasado tanta gente que admiro, es la primera vez que vemos la película con el público y con gran parte del equipo”. ‘Romería’ es la tercera parte de una trilogía que empezó con ‘Verano 1993’ y ‘Alcarràs’, con la que ganó el Oso de Oro en Berlín. “Siento que estoy cerrando una especie de ciclo para mí con tres películas que tienen que ver con mi familia, que es muy extensa, y con las tres distintas ramas de ella”.

Todo ha pasado muy rápido en la carrera de la segunda directora española en competir por la Palma de Oro en las 78 ediciones del festival más importante del planeta. “Justo ayer vi al nuevo director de la London Film School, que es donde estudié un máster de cine gracias a una beca. Han pasado diez desde entonces y en ese tiempo he hecho tres pelis y he tenido dos hijos”. El segundo de ellos, una niña, va a nacer solo unas semanas después de pasar por Cannes (el resto de los mortales tendrán que esperar al 5 de septiembre para su llegado a los cines españoles). Simón cree que sus tres primeras películas son “exploraciones familiares que parten de emociones que he sentido de forma muy fuerte”. La catalana aún más allá. “Es como vivir dos partos a la vez, el de la película y el de mi hija. Siento que es un momento muy mágico”.

‘Romería’, un proyecto de Elastica en coproducción con Dos Soles Media y la alemana Ventall Cinema, es la película más cara y compleja en la filmografía de la catalana. “Hay algo en mi manera de trabajar que implica siempre mucho tiempo, desde la creación del guion hasta el proceso de casting. Luego están los ensayos, que requieren tiempo e implicación de los actores. Muchas veces, cuando no hay dinero, se pasa por encima de los ensayos, pero para mí todas esas cosas son esenciales aunque no tengan un impacto muy visible en la pantalla”.

La directora Carla Simón charla con un grupo de actores durante el rodaje de 'Romería'
La directora Carla Simón charla con un grupo de actores durante el rodaje de 'Romería' · Fotografía: Mario Llorca

‘Romería’ cuenta la historia de Marina, una joven que viaja a Vigo para conseguir un documento legal que le permita acceder a una beca universitaria y, además, conocer a la familia de su padre biológico, que murió de sida, al igual que su madre, cuando ella era muy pequeña. “Es un papel que sí necesité en mi vida en un momento dado, aunque la verdad es que en realidad eso se quedó en la nada porque lo que iba a hacer era conocer a mi familia”, admite veinte años después de aquel viaje que cambió su vida. A través de los encuentros con sus tíos, tías y abuelos, la joven intenta reconstruir un relato de sus padres, pero todos sienten demasiada vergüenza hacia los conflictos de drogas de la pareja, algo que Marina les recuerda con su presencia.

"Seguramente ‘Romería’ sea algo menos emocional que las otras, pero también es más experiencial. Es algo que me apetecía mucho probar"

A pesar de que todas beben de la historia de su familia, el lenguaje visual, el tono y la estructura de su nuevo trabajo se aleja de lo visto en ‘Verano 1993’ y ‘Alcarràs’. Con su nuevo trabajo, la Carla más cerebral se ha abierto paso. “Es posible, sí. Seguramente sea una película algo menos emocional que las otras, pero también creo que es más experiencial. Es algo que me apetecía mucho probar. Creo que cada peli tiene que suponer un reto distinto y hacerte sentir que estás creciendo como cineasta al probar cosas nuevas”, explica desde la Costa Azul, a donde ha llegado por carretera desde Barcelona, donde reside. “Es verdad que hay una parte de exploración familiar, que era un terreno más conocido, a pesar de que es un tipo de familia muy distinta a la que había retratado antes. ‘Romería’ me ha hecho reflexionar sobre el poder del cine para crear estas imágenes que no existen y que no parten de la realidad, como esa recreación de los diálogos con mis padres. Ha sido muy bonito utilizar el cine como herramienta para crear aquellos recuerdos que no tengo”, reflexiona.

Simón cree que “sería bonito” que la película sirviera, de alguna, para sanar los silencios que se han vivido en miles de familias españolas afectadas de forma trágica por las adicciones a las drogas y la crisis del sida, dos de los grandes fantasmas en la sociedad española de finales del siglo XX. “En la película se muestra a toda esa generación que vivió su juventud en los 80 y que había tenido una infancia muy reprimida durante el franquismo. Ellos fueron realmente los que lo pusieron todo un poco patas arriba, los que cuestionaron los valores conservadores y católicos del país en el que vivíamos”, recuerda, aunque también se muestra consciente de que “en ese auge de libertad, hay una cara B, como fue la entrada de la heroína en España”.

En octubre de 1981 falleció en Barcelona un hombre de 35 años que ha pasado a la historia como la primera víctima del sida en nuestro país. “Las muertes por sida o sobredosis causaron mucho dolor y se enterró en la memoria de muchas familias por el tabú que implicaba y la dificultad de hablar de ello. Siento que todo eso ha sido arrastrado hasta ahora. Eso también es memoria histórica y hay que sacarlo a la luz. Hay que reivindicar a toda esa generación y colocarlos en su sitio, porque creo que estamos donde estamos también gracias a eso que hicieron ellos”, zanja, reivindicativa.

Llúcia Garcia y Mitch posan en el rodaje de 'Romería', de Carla Simón
Llúcia Garcia y Mitch posan en el rodaje de 'Romería', de Carla Simón · Fotografía: Mario Llorca

Llúcia García y Mitch son los protagonistas de ‘Romería’, la primera película de unas carreras que, se intuye, no están más que en su casilla de salida. “Encontramos en la calle a Llúcia mientras volvía de una excursión con los boy scouts y bajaba con su mochila de un autobús. En ese momento la paramos y la invitamos a venir al casting. Así surgió todo. Ella no había actuado nunca. Tardamos ocho o nueve meses en encontrarla. Luego está Mitch, que es músico y que sí había hecho alguna cosa de interpretación anteriormente”, recuerda. Los personajes de la abuela paterna o uno de los tíos de Marina también recayeron en actores no profesionales, una figura recurrente en la carrera de la cineasta. Todos ellos están acompañados de nombres como Tristán Ulloa, Janet Novás, Myriam Gallego y Sara Casasnovas, entre otros nombres. “Tenemos una mezcla muy rica para recrear esta familia. Básicamente el objetivo era encontrar actores que se parecieran mucho a los personajes que había escrito, que es una premisa he seguido con las tres pelis que he hecho. Me parece que cuando tienes actores que en esencia tienen algo familiar con los personajes, que los pueden sentir cerca, ya tienes mucho trabajo hecho. Sean o no sean actores”.

"En ese auge de libertad que se vivió en los 89 hay una cara B: la entrada de la heroína en España. Eso también es memoria histórica y hay que sacarlo a la luz"

La barcelonesa es la líder de una revolución feminista para el cine español que inició en 2018 una racha de siete Goya a la Mejor Dirección novel que acabaron en manos de mujeres, siendo sucedida por Arantxa Echevarría, Belén Funes, Pilar Palomero, Clara Roquet, Alauda Ruiz de Azúa y Estíbaliz Urresola Solaguren hasta la victoria de Javier Macipe el pasado febrero. “Creo que vivimos un momento dulce en el sentido de estar avanzando mucho hacia la paridad, aunque eso no significa que estemos ahí”, recuerda Simón. “Aún falta mucho recorrido, pero de repente nos hemos dado cuenta de que si somos la mitad del mundo, debemos contar la mitad de historias. Esto antes no era así y había que repararlo. Se está haciendo poco a poco y creo que en parte no es solo gracias a las mujeres guionistas y directoras, sino también a productoras, a que haya más jefas de equipo que sean mujeres…. Todo es un proceso que estamos viviendo y que siento que no para y que no va a parar, pero hay que estar alerta porque es muy frágil aún. Todavía se está consolidando, pero aún no lo suficiente como para decir, 'ah, bueno, pues ya está'". Palabra de aspirante a la Palma de Oro.

También te puede interesar